La chica "no te pierdas"

Ella no tenía amigos verdaderos. Chabelis, siempre se despedia con un : No te pierdas. Pero casi nadie la llamaba. Fue entonces que empezó a ver a Rey el de Menudo por todas partes.
Él siempre aparecia con un sombrero diferente, como el concurso del Chacal que hacía don Francisco, en Sábado Gigante. Que necio, pensaba Chabelis, es que ni si quiera era su preferido. A ella siempre le gustó René, porque fue el primer ex menudo que pegó como solista. Pero era Rey, el que siempre llegaba de la forma más inesperada.

-Oye, nunca compré ningén souvenir de Menudo, ni si quiera los panties, que quizás hubiese sido lo único que hubiera pedido en casa para Navidad o algún cumpleaños.
-Pero tenías los discos.
-Sí, pero nunca compré el que tú salías, dejé de comprarlos desde A volar. Y el más que me gustaba era el de “Voy a América, voy a ver al tío Tom, voy a soñar, voy a ver a Olivia Newton John.” Si Rene quería ver a Olivia, yo sería entonces como ella, rubia, y me rizaría el pelo, para nunca parecerme a Sandra Dee. Y tiraría el cigarrillo en el piso, mientras John Travolta canta “Its electrifying”. ¿Qué canciones cantabas tu? Chicle de amor, es la única que recuerdo.
- ¿Sales hoy?
- -Pues, no sé, quizás, unas amigas quedaron en llamarme.
- Ah, sí, cierto, las modelitos, pendejas de Noctámbulo, con esas vas a jangiar tú, mija, si esas sólo te cachetiaron el pon, porque estaban a pie. Oye, pero no te pongas así, no te quiero aguar la fiesta, ¿quieres que te cante una de Julio Iglesias? Mira, vistete, sal y comprate algo sexy, una camisita de esas con la espalda por fuera, ¡mira que los zapatos en Novus, están en especial!



Chabelis entro a Novus, buscando unas plataformas, era lo mas alto que podia aguantarla.

-¿Doradas o plateadas? Ay, míralas en bronce, que pega con todo, traemelas en seis y medio.

Siempre subiendo y bajando de peso, buscando verse sexy, enseñando las tetas, las piernas, llenas de flores de Victoria’s Secret, strawberry champagne,

-Qué delicia, vámonos de happy hour, a Coches, a ver lo que aparece.
-¡Pssst! ¿A dónde vas sin mi? ¿A Coches? ¿Sola?
-Ajá.
-Tienes un barro en la quijá, ¿lo viste?
-Mierda. Ahora mismo me lo voy a explotar, me voy a embarrar de pancake, ya verás que no se va a notar. Los del trabajo van para allá, no te preocupes, no voy a estar en una esquina sola.
-Ja, ja, ja, esos charros, me caen bien esos macharranes, tan patos que se ponen cuando escuchan a Menudo, después de tres palos. Bueno, cool, te veré cuando pongan nuestro set, que si no me equivoco es despues del happy hour de Miller. Bueno, el momento más triste a llegado, mamita rica. ¡Ah¡ y mira plis, por favor, no te pongas las leggins negras con la camisa Versace wanna be, sí, la que te compraste en Orlando, ¿okey? Y no me mires así… Que ahora estoy casado.


Las mujeres entran gratis los miércoles en Coaches, pero siempre hay que hacer fila. A menos que te encuentres a alguien que te conozca y te cuele. Pero Chabelis no veía a nadie. Bueno alguien la llamó desde la fila. Era Doris, la doña que cogía la clase de Español con ella en Sagrado.
Pero, ¿qué hacía esa doña en Coaches?

¡Ay! que se joda, me voy a colar, que ya todo el mundo esta empezando a mirame, bueno es que si no es así, ni me miran. ¿Por qué cuando camino con mis aires de Uma Thurman y Olivia Newton John, nadie me mira?¿ Que será lo que ven? ¿Una gordi cookie? Mañana empiezo a almorzar en Subway o con la dieta Special K? Pero a la media noche, cuando se termmine el happy hour de Miller y empiece el de Coors Light, en el set de Menudo, alguien me sacará y bailaremos como Carlton el de Fresh Prince y le demostrare a este ex ídolo de la juventud, que la aventura ha comenzado y no se sabe que va a pasar. Ja , sí, en esa canción.

-¡Eh! Doris, mija, ¿qué es de tu vida, qué tu haces aquí? ¿Girls night out?
-Aquí, buscando guayaba.

Esta se quedo en Ruben Blades. Hello, ya vamos por Victor Manuel.

-Nena, que bella tu camisa, ¿de dónde es?
-De Infinito. Del racket en especial que ponen atrás, yo creo que todavía quedaban par de larges.
-Yo pensé que tu teínas, novio.
-No, salgo de vez en cuando con un amigo.
-Ah, sí, tú me habías dicho, sí, un tal Rey. ¿De que corte? Ja, ja.

Que chiste mas charro, por Dios, como me la voy a sacar de encima, esta si que me va a espantar a los jevos.

Nadie la saco a bailar, pero Rey le dedicó “Súbete a mi moto”, estaba borracha, a dónde la llevaría en esa motora, ¿a la casa de la Señora Mía?

-¿Por qué no vamos mejor en el globo? “Como Cannonball, fuerte como Cannonball”

No era Rey. Era un guardia.
¿Charlie?¿Otro menudo? No, nunca soporte su pelo rizado a lo TCB. Chabelis se desmayó en los brazos de Charlie, se llamaba Charlie, ni Nydia Caro lo hubiera podido presentar mejor.
-Charlie, la chica viene de un rave, tienes que ser flexible, le echaron algo en la cerveza.
-Oh Rey, dile a Charlie, que es un dios azul, Charlie, no eres el de Menudo, ¿verdad? Eres un glorioso polícia YMCA, oh Charlie, no, no, no puede ser, aquí, desmayada en los brazos de un aunténtico “queer eye”.


Continuara…