Profecías de Olga Mesmer

Todos especularán de quién es quién en el cuento. Que si es ficción, pero es un diario. Ella sentirá mucho miedo del que dirán, si la confundirán con una prostituta o una publicista. Como hablará de tantos amantes. "Tantos", ¿son muchos?, dirá. Escribirá su diario sin control. Con el corazón abierto. "Come de mi, come de mi carne". Entre caníbales, así se sentirá. Dejará la esclavitud y volverá a nacer en una cuna snob y sonará "Moon River" y será rubia y muy delgada, artista. A los 3 años de edad cantará como Julie Andrews y en St Johns High School saldrá en todos los musicales. Romeo y Julieta, tragedia de otro amor inmenso que esta vez se atreverá a vivir. En el Primer, segundo y tercer acto se tragará la última gota de veneno que fue la que la mató de verdad. Le aterrará la abundancia, pero por su metabolismo, será eternamente flaca y brillante. Podrá comer todos los postres del restaurante de turno del SOFO en el Viejo San Juan. Y no habrá mucho ácido en su escritura, no lo suficiente, para drogar a un suicida con alas, que juega a suicidarse, porque sabe que tiene alas y que se salvará. ¡Ja! Cobarde. Red Bull te da alas. Alas sugar free. Vuelan más alto, cada 3 minutos, como el Metro de Madrid.